La artrosis se puede controlar, detener, prevenir, ralentizar.  No debemos conformarnos con eliminar el dolor forrándonos a analgésicos, sino ir al fondo de la cuestión.

Hace no tanto tiempo, la artrosis, esa temida y dolorosa patología, sólo se trataba con analgésicos y antinflamatorios.  Hoy, las cosas han cambiado. No vamos sólo a tratar los síntomas, sino a prevenir o  ralentizar la enfermedad  desde su origen, desde dentro.

La artrosis, sintomatología

Un buen día, te levantas con rigidez y dolor en una de las articulaciones.

Es como si te clavaran una aguja, siendo tan intenso que en lo único que se piensa es en poner fin al malestar.

Antes, se creía que la articulación estaba desgastada, y que no era posible la regeneración.

Pero eso no es así.

Al ser un tejido vivo, si se provee los nutrientes que se requieren, se puede regenerar, revertir la enfermedad,  o por lo menos detener su progresión.

Si optamos por forrarnos a analgésicos, no sólo no arreglamos el problema de fondo, sino que podemos perjudicar la mucosa estomacal añadiendo un perjuicio al que ya teníamos.

Pasamos a la acción

Pues vamos a proponer la opción que nos parece mejor. Nutrir las articulaciones, tomando ciertos suplementos alimenticios y realizando ciertos ejercicios  pasamos  a describir.

En el Centro Médico Healthing hemos seleccionado tres suplementos:

Carticure Plus,  se compone de colágeno, glucosamina clorhidrato, condroitín sulfato, vitamina C, manganeso y cobre.  Todos estos ingredientes, de primera calidad, son la base  de la composición del líquido sinovial que protege la articulación, y también fortalece el sistema óseo.

Tenflex, a base de colágeno, condroitín sulfato, arginina, curcumina, vitamina C, silicio, zinc, manganeso y cobre, dirigido más específicamente al bienestar de tendones y ligamentos.

Curcufit, la curcumina es un antinflamatorio natural que ayuda a aliviar el dolor articular aparte de muchas otras propiedades que tiene éste principio activo.

La dieta antinflamatoria

La dieta que debemos llevar es rica en frutas y verduras frescas y de temporada, y evitar los alimentos que producen inflamación, como el exceso de Omega 6, los azúcares, y es importante en una primera etapa evitar el gluten.

En muchas ocasiones, aunque no padezcamos enfermedad celiaca, los cereales no los digerimos de forma adecuada causando éstos una inflamación a nivel digestivo.

Sabemos que esta inflamación altera nuestro sistema inmunológico, pudiendo de ésta manera producir dolor articular.

Ejercicio

En esto también la teoría ha cambiado. Hay que moverse, evitando por supuesto hacerse daño.

Pero el ejercicio mejora la circulación, y es ésta la que lleva los nutrientes a las células.

  • Caminar, es un ejercicio moderado que favorece un mejor riego sanguíneo, trabaja la musculatura de las piernas y lo recomendamos para cualquiera.

Procura llevar un calzado adecuado.

  • El ejercicio en el agua es adecuado, ya que en éste medio las articulaciones sufren menos.
  • Tai-chi, son movimientos continuos, lentos que trabajan el equilibrio, la musculatura y la concentración.
  • Cualquier ejercicio que te guste, ya que al final, lo que te gusta es lo que vas a hacer.
  • Redcord; en el Centro Médico Healthing, es un sistema de ejercitar los músculos que queremos sin perjuicio de lesionarse.
  • Alter-G, máquina para correr, caminar, sin gravedad, por lo que las articulaciones no sufren.