
Los enjuagues bucales y nasales arrastran y limpian los virus alojados en éstas vías, tengámoslo en cuenta. Vamos a introducir este ritual en nuestra rutina diaria.
Los enjuagues bucales y nasales
Muchas veces lo obvio se nos pasa, y es por eso que me parece oportuno volverlo a poner encima de la mesa.
Otra vez, los remedios de la abuela tienen un sitio de honor, y una vez más, en vez de irnos a soluciones complicadas, la lógica y el sentido común se imponen.
Insisten los medios, y con razón, en la importancia del lavado de manos. Pero no nos dicen nada sobre la importancia fundamental del enjuague bucal y nasal.
Sabemos que el jabón destruye con facilidad el virus, y que sin huésped su tiempo de vida es de unas horas. Su transmisión, de persona a persona es a través del contacto, puede ser las manos, o cualquier superficie infectada, pero sobre todo a través de la boca y la nariz.
Toser, estornudar, hablar, cantar, todo lo que hacemos en nuestro día a día como parte natural de nuestra naturaleza, es peligroso a la hora de contagiar a nuestros vecinos.
Taparnos la boca y la nariz con una mascarilla es una barrera para evitarlo, pero podemos incluir para reforzar la protección, un lavado de boca y nariz a conciencia.
En un primer momento, el virus se aloja ahí, por lo que todos, a nivel preventivo, y los que estén ya infectados, para bajar la carga viral y evitar contagios, deberían incluir éste protocolo en la higiene diaria.
Podemos evitar que se propague, que viaje hacia nuestros órganos internos y produzca un mayor mal, llegando a los pulmones, por ejemplo. Pero además, restamos posibilidades de transmisión a los demás.
Por estas razones, el enjuague bucal y nasal, deberíamos incluirlo en la higiene diaria.
El enjuague bucal y nasal, como hacerlo
Tenemos que tener en cuenta que la boca es residencia habitual de millones de microorganismos, y su equilibrio es tan importante que puede ser origen de disbiosis intestinal, inflamación, y otras patologías que nada, en principio, tendrían que tener que ver con la boca.
Pero es que los microorganismos viajan por el cuerpo, invaden otras áreas, y entre ellos están los virus.
En éste primer momento, en el que el enemigo está en una zona de más fácil acceso, podemos hacerles la vida más difícil.
A modo preventivo, podemos incidir más profundamente en el lavado de los dientes, utilizando además de la pasta dentífrica, un irrigador a presión para una limpieza más a fondo.
Después, hacer un cepillado de la lengua, pues aquí residen bacterias y virus nocivos.
Una vez terminado este proceso, hay que terminar la limpieza con un buen enjuague bucal.
A continuación, incluyamos un lavado nasal, con agua salina.
Estas medidas son muy eficaces para eliminar, o bajar la carga viral a nivel de las vías respiratorias altas.
Y más…
En otros artículos hemos hablado de la eficacia probada por varios doctores del peróxido de hidrógeno, que podemos incluir en una dilución en agua salina de 0.1 mm y añadir otro elemento que se ha probado eficaz en la lucha contra los invasores indeseables: el yodo.
Por lo que vamos acumulando armamento para que no nos pille desprevenido el ataque de los indeseables virus.
Los enjuagues los incorporamos en nuestra rutina, y si ya estamos infectados por Covid 19, las inhalaciones con peróxido de hidrógeno, yodo y agua de mar, se han probado eficaces en la descongestión pulmonar, mejorando la respiración, y llegando a la curación evitando pasar por hospitales ni ucis.
Recapitulando
Si tuviéramos que hacer un protocolo preventivo, incluso de sanación, sabemos que debemos apoyar el sistema inmunológico, haciendo ejercicio, combatiendo el estrés, descansando y alimentándonos de manera correcta.
Además, hay unos indicadores clave, como el nivel de vitamina D, que es fundamental para la ayuda al sistema inmune. Se puede tomar en suplemento si estamos deficitarios.
La vitamina C es protagonista de la lucha, ya sea con la alimentación o si estamos más necesitados, en pastillas. Incluso por vía intravenosa.
El zinc, mineral con propiedades antivíricas, otro aliado en ésta batalla.
Y las medidas de siempre, distancia, lavado de manos, en la que ahora incluimos la boca y la nariz.
Ventilar, intentar estar en espacios donde el aire circule.
Que no nos coja desprevenidos.
Es un consejo del Centro Médico Healthing.